En la actualidad las empresas buscan estrategias y medidas con las que aumentar la sostenibilidad en su cadena de producción.
Para conseguirlo, uno de los valores en los que más nos podemos fijar es el de la huella de carbono.
Si desconoces este concepto, a continuación te explicamos en qué consiste y cómo se puede compensar lo máximo posible.
Índice
¿Qué es la huella de carbono de una empresa?
La huella de carbono es el impacto que una empresa ocasiona en el medio ambiente por el desarrollo de sus productos o servicios.
De una forma más específica, se suele identificar por la cantidad de gases de efecto invernadero que emite, ya sea directa o indirectamente, a la atmósfera.
Existe una fórmula de cálculo que sirve para identificar de forma más exacta el valor de esa huella de carbono. Consiste en multiplicar el dato de consumo por el factor de emisión, según el combustible o el gas utilizado.
Cómo compensar la huella de carbono de una empresa
Con relación a la huella de carbono hay 2 acciones que una empresa puede realizar. Por un lado, reducir este valor lo máximo posible, para lo que requiere modificar su modelo de producción y acoger medidas más sostenibles a la hora de desarrollar su trabajo.
Por otro lado, también es posible compensar la huella de carbono, que consiste en adoptar medidas con las que mejorar la sostenibilidad de la empresa y fomentar un medio ambiente menos contaminado.
En este aspecto encontramos varias medidas que casi todas las empresas pueden acoger con relativa facilidad y que tendrían resultados proporcionalmente muy significativos.
El uso de materiales que pueden reciclarse como sucede con los productos de IBP Uniuso es un claro ejemplo de ello. Además de ser prendas y accesorios desechables, también están fabricados con materiales 100% reciclables utilizando los contenedores asociados correspondientes.
De hecho, usar materiales desechables también ayuda a compensar la huella de carbono, porque elimina la tarea de lavar y limpiar la ropa o bien otros productos, de manera que la contaminación vinculada a estas acciones desaparece.
Otra alternativa es aprovechar embalaje sostenible como papel Kraft y opciones similares. Además de ser reciclable, este material tiene menor peso que otros más tradicionales utilizados para embalar productos. En consecuencia, un embalaje sostenible reduce la emisión de gases contaminantes provocados en su transporte.
Desde la empresa es posible incentivar esta sostenibilidad entre los empleados. Una oficina puede facilitar diferentes tipos de contenedores de recogida selectiva, para luego transportar estos residuos reciclables de una forma más cómoda y eficiente.
En grandes empresas o industrias, estos contenedores tienen que ser mucho más voluminosos, pero igualmente es posible contratar los servicios profesionales de su gestión, transporte y tratamiento, para que la huella de carbono se compense lo máximo posible.
Algunas compañías también invierten en espacios verdes que complementan con las instalaciones de la empresa, así como organizan o participan en iniciativas de sostenibilidad, invitando a todos los empleados, para lograr una mayor concienciación en grupo sobre este tema.
